Sentir las posibilidades de la terapia vocal y la expresión de nuestra voz y , y los beneficios que se obtienen, ha sido todo un descubrimiento para mí. Cuando elijes el camino del desarrollo personal y apuestas por el aprendizaje y una mejora continua, es importante y necesario ampliar el abanico de herramientas que contribuyen al autoconocimiento y desarrollo personal. Es una filosofía de vida y la forma más coherente y acertada de ayudar a otras personas en su propio camino.
Salimos al mundo a través de un llanto, y nos expresarnos y crecemos con un sonido propio, único. Nuestra voz crece con la persona. Se va quebrando ante necesidades no satisfechas, creencias, miedos no superados, y otras emociones que no hemos sabido gestionar adecuadamente y que se han adherido a ella, dándole peculiaridad, tonos y color no siempre deseados.
Es vital, si queremos avanzar y desarrollarnos con coherencia, poner conciencia en la tonalidad de nuestras palabras. Además, permitirnos expresar nuestros sentimientos, en lugar de nuestras necesidades y bloqueos en forma de desahogo vocal. El trabajo con la voz es importante para cualquier persona, aunque no seas locutor de radio, cantante o actor. La voz nos acompaña a lo largo de nuestra vida y nos conviene cuidarla.
La conexión de la terapia vocal con nuestras emociones.
Es importante entender que cada reflexión que hacemos sobre nuestra voz, cada cambio voluntario, o cada conexión con nuestras emociones nos ayuda a comprendernos mejor. A aceptar nuestras peculiaridades y hasta a empatizar con las emociones de otros. Pero hemos de convertir esos pensamientos conscientes en acción. Y las herramientas nos facilitan el aprendizaje y unos resultados en muchos casos extraordinarios.
La expresión y la terapia vocal es una herramienta que nos ayuda a mejorar y resolver muchos de estos problemas. Desde los digestivos hasta los respiratorios o los relacionados con la ansiedad y el estrés. Si hay un cambio de tono involuntario o abrupto, si hay bloqueos en la garganta o el pecho… y no siempre es necesario visitar a un médico.
En primer lugar, el abordaje de la voz desde la expresión y como camino de avance nos propone ejercicios y técnicas que nos llevan a encontrar un tono vocal saludable. A encontrar el tono que nos pertenece, y que en algunos casos se enturbió con el paso de los años porque las experiencias vividas nos afectan.
Afonía crónica, voz atada y atascada, carraspeos continuos.
Mi afonía crónica, mi voz atada y atascada, los carraspeos continuos y aquellos días de invierno con hilillos de voz pertenecen ya al pasado. Después de nueve meses trabajando semanalmente mi voz os aseguro que me siento más ligera. Creo que necesitaba darle espacio y libertad a mi voz, si se puede hablar de una voz libre y limpia, ¡Así que me quedé sin conocer al otorrino!
Con el extraordinario trabajo que desarrolla Fernando, he aprendido a liberarme del peso de algunas emociones; a proyectar mi voz con seguridad y quitarme capas hasta descubrir la esencia de mi voz; a proyectar mejor, a entonar, yo que pensaba que “tenía por oído un zapato” y resulta que era una creencia. Hay un antes y un después, aunque sigo aprendiendo.
Son clases relajantes, divertidas, enfocadas a reconocer y llegar a nuestra voz, a la que nos corresponde; a escuchar, respirar y proyectar. Realizamos un trabajo a tres bandas, en el plano físico, mental y emocional al practicar los ejercicios de voz y de respiración. Y en dos sentidos, como grupo y haciendo hincapié en el desarrollo particular de cada persona, puesto que cada alumno y cada alumna tenemos nuestra mochila con nuestras vivencias.
En palabras de Fernando: «Nacemos llorando, morimos suspirando… Con la voz sacamos fuera lo que necesitamos». “La voz es placer”.
Para mí es un placer haberle conocido, haber conectado y seguir creciendo personal y profesionalmente.
Te invito a escuchar esta charla con Fernando, porque comparte su experiencia y sus Proyectos. ¡Estamos pendientes de tu Manual del Buen Uso de la Voz!