El eco de las palabras «a nadie le importo» en el silencio de la soledad puede resonar con gran dolor en el corazón de una persona.
Te comprendo. Si tu mente te dice «a nadie le importo» puedes llegar a sentir una gran carga emocional a tu espalda, como si estuvieras atrapada en un mar de indiferencia.
Quiero que sepas que cada palabra que aparece en esa frase no define tu valor ni la riqueza de tu Ser.
Hay quien camina por la vida con una sombra de melancolía que se ha convertido en su fiel acompañante. Su corazón lleva las marcas sutiles o profundas de experiencias pasadas. Cicatrices emocionales que han tejido un relato de sentirse poco importante y rechazada en lo personal, y en ocasiones en el área profesional.
Te has dedicado años a complacer a los demás, a sacrificarte en silencio por quienes te rodean.
¿Para qué? Para que te aprueben, te quieran…
A menudo, la sensación de que te valoran poco se cuela como una sombra sobre tu autoestima. Te comparas. Y te sientes un Ser más pequeño aún.
Te encuentras en tu espejo con una mirada que refleja más preguntas que respuestas. No te gusta lo que ves ni cómo eres por dentro.
¿Qué sucede en terreno laboral?
Un muro te separa de la conexión auténtica que deseas en el área profesional.
En las reuniones piensas que a nadie le importo. Ves cómo tus ideas y propuestas son pasadas por alto. Aún con tus esfuerzos incansables, tu perfección y autoexigencia e importantes contribuciones, nada cambia.
La falta de valoración y reconocimiento te sumerge en una profunda frustración. En un sentimiento de desvalorización que alimenta la creencias falsas de «no valgo nada» y tu voz no importa en el entorno laboral.
Cambias de empresa, ¡y se repite la situación!
Vas provocando de forma inconsciente situaciones y atrayendo personas que te hacen sentir que no te aprecian ni valoran.
Te rechazas a ti y a tus logros. Solo quieres desaparecer.
Además, sucede algo paradójico. Sabes que eres capaz solo que dudas, y cuando alguien halaga tus capacidades le restas importancia o crees que lo hacen por compasión.
Piensas que hay profesionales mejores, que no lo mereces. Es la huida por respuesta, hasta llegas a rechazar propuestas o dejarlas pasar. Ojo, no tomar decisiones también es elegir.
Las opciones de ascenso y evolución profesional parecen desvanecerse.
Además, llevas regular la relación con la autoridad y la comunicación con figuras que la representan. En especial si son de tu mismo sexo.
¿Y cómo te sientes en tus relaciones personales?
La gente me ignora, piensas.
En tu círculo social las interacciones no son menos desafiantes. Si yo intento encajar, solo que te sientes como una pieza fuera de lugar en las conversaciones grupales.
Tus intentos de interactuar son recibidos con desgana. A veces con comentarios irónicos o risas que te avergüenzan y deterioran aún más tu ya baja autoestima.
Deseas conectar con el grupo y quienes te rodean. Solo que te encuentras, una y otra vez, enfrentando actitudes frías, indiferencia y hasta crueldad disfrazada. Si es que a nadie le importo… Y llegas a boicotear tus planes para socializar.
Ya sea en amistades o en intentos de romance, con tus hijos e hijas, la sensación de no ser suficiente para los demás se ha convertido en una constante en tu vida.
La soledad emocional se instala como una sombra persistente y cada intento de acercarse a alguien es más complicado aún. Te da hasta pereza. Y miedo.
A nadie le importo. Has experimentado el dolor de la herida de rechazo.
Las palabras no dichas y las oportunidades perdidas en relaciones personales o en el ámbito laboral se han acumulado construyendo una barrera alrededor de tu corazón. Un muro que te separa de la conexión auténtica que anhelas con tu pareja, tus amistades, tu madre, tus hijos, con ese grupo de amistades.
Ser tú en cualquier escenario.
Es probable que lleves contigo una colección de «y si» y «quizás», preguntas que se mezclan con tus pensamientos.
Sin embargo, en el rincón más íntimo de tu corazón, alberga una chispa de esperanza a un cambio.
¿Y si hubiera tomado mi propia decisión y caminos diferentes?
¿Si hubiera hablado más fuerte y puesto los límites de forma clara y a tiempo?
¿Y si hubiera expresado lo que necesitaba y propuesto lo que me apetecía?
(o lo que NO me gustaba NI quería).
¿Cómo cambiar el a nadie le importo por soy importante en mis relaciones?
¿Cómo dar la vuelta a esta percepción de tu vida?
El camino de la conciencia: conocerte y aceptarte tal y como eres.
Un anhelo de reconectar contigo y redescubrir tu valía. A medida que navegas por esta etapa adulta, empiezas a comprender que la solución que buscas no vendrá de afuera, sino de tu interior.
Es tu propia aceptación y valoración la que necesitas sentir, despertar y activar.
Te felicito.
Se trata de un viaje hacia la autenticidad, donde aprenderás como poner límites claros y en el momento adecuado; a conectar y recordar aquellos momentos de tu vida que sentiste confianza plena.
Aprenderás a valorar y celebrar tus logros; y a abrazar la verdad de que te mereces amar y sentir amor y respeto.
Te das cuenta de que tu fuerza radica también en tu vulnerabilidad y tus miedos, en la capacidad de descubrir y abrazar tus imperfecciones; de agradecer y aprender de tus experiencias y decisiones menos afortunadas.
Sí, es posible escribir una nueva historia. Te lo aseguro. Así lo he vivido.
Una histora de autoafirmación y amor propio sano.
El camino es desafiante y pleno de confianza.
Una promesa de que quien conecta mente y corazón, renace y re-descubre a una persona más fuerte, senera, completa y consciente. Tú: la persona más importante de tu vida.
Tu valía no está determinada por la percepción momentánea de otras personas.
Lee esa frase otra vez😊
Ellas tienen también sus propias heridas emocionales y miedos.
¡Empieza a hacer algo diferente!
Recuerda que eres un ser único, con dones, habilidades y cualidades que merecen ser reconocidos. Y la primera persona que sentirse valiosa y ha de reconocerlos en ti eres tú.
Hoy te comparto una primera acción para empezar a generar cambios emocionales positivos en tu interior:
Trae a tu mente y corazón, y muy importante, siente cómo está tu cuerpo. Siente las sensaciones y emociones del momento cuando conseguiste algún logro en el pasado y en el presente. ¡Y celébralo contigo! Da un salto, grita Wowww, date un abrazo. No te rechaces.
¿Te identificas con la herida de rechazo?
Dime, ¿te gustaría dar un paso más para descubrir y empezar a sanar tus heridas de la infancia?
¡Te animo a descubrir tus heridas de infancia porque son parte de tu historia familiar!
Descubrir para dejarlas atrás y mejorar tus relaciones. La primera contigo.
¿Te apetece el plan?
Aquí puedes realizar el test de heridas de rechazo.
En ocasiones la herida de rechazo va de mano de la herida de abandono.
Estoy disponible para ti, para acompañarte en tu proceso de transformación personal y/o profesional. Si estás en plena crisis existencial o si ya has experimentado otros cambios, pero ves que NO AVANZAS.
Programas online y semipresenciales en Madrid, para la transformación subconsciente y gestión de miedos y heridas de infancia. Cambio fácil, rápido y sostenible en el tiempo desde la reflexión y la acción.
Me apoyo en una metodología y técnicas que actúan a nivel mente subconsciente como Psychk online y constelaciones familiares individuales online. Terapeuta Capacitado LNT® sesiones la nueva terapia LNT® terapia cuantica online.
* Estas técnicas no son tratamientos médicos o psicológicos. Sí pueden complementarlos.
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